La puesta en marcha de la Ley de Eficiencia Energética ha contribuido a que cada vez se hable más de viviendas sostenibles, edificios ecológicos y autosustentables, o barrios ecológicos.
Todas estas terminologías comienzan a sonarnos cada vez más. El respeto por el medio ambiente y el ahorro de energía va aumentando su importancia, y cada vez son más las propuestas que van surgiendo en diferentes rincones del mundo.
Las nuevas edificaciones son cada vez más sostenibles, más respetuosas con el medio ambiente y suponen un mayor ahorro energético (y económico). En España, la mayor parte de los edificios construidos tienen más de 50 años, poco eficientes generalmente. Todavía nos queda mucho camino que recorrer para llegar al nivel de otros países, aunque ya han surgido diferentes iniciativas de barrios ecológicos como el Ecobarrio de Vallecas (Madrid), el de Motril (Granada), el de Sevilla o el de Figueras (Gerona).
Un ecobarrio es una zona urbana proyectada para que su impacto medioambiental sea lo mínimo. Se pretende que estos barrios sean 100% eficientes. En los que el ahorro energético sea el mayor posible sin que su impacto ecológico sea notable.
Entre los objetivos principales de los barrios ecológicos destacan:
-Conseguir el mayor ahorro energético, obteniendo energía sostenible. Para este objetivo se utilizan paneles solares en fachadas y tejados.
–Mejorar el entorno y la biodiversidad. En estos barrios se intenta adaptar la construcción a la naturaleza, colocando árboles y zonas verdes.
-Utilizar en las edificaciones materiales reciclables y cuya obtención no contribuya a dañar el medio ambiente.
Además, en estos barrios se incentiva el uso del transporte público, evitando la contaminación generada por el uso de vehículos privados. Se busca que el barrio esté perfectamente comunicado por transporte público, para que sea innecesario desplazarse en coche.
Vauban y Riesefeld, en Alemania, fueron los primeros ecobarrios del mundo, y a día de hoy son una prueba de que este modelo de urbanismo ecológico es posible.
En España cada vez se tienen más en cuenta los parámetros de sostenibilidad, ahorro energético y autoeficiencia, lo que poco a poco nos acerca a un aumento de barrios ecológicos. Además la Directiva de la Unión Europea 2010/31/UE ya indica que, a partir del 31 de diciembre de 2020, los edificios que se construyan sean de consumo de energía casi nulo, en los términos que se fijen posteriormente en nuestra legislación nacional.
Después de la burbuja inmobiliaria que todos hemos contribuido a desarrollar, crecer urbanísticamente de forma sostenible y eficiente es una obligación además de un reto, de presente y de futuro para todos los ciudadanos, se lo debemos a nuestro entorno, a las futuras generaciones y a nuestra propia ética.